Desde mis tiempos de escuela me ocupaba con preferencia con todo lo
que tuviera que ver con imágenes y sonidos. Recibí clases de música,
comencé a dibujar, me construía mis propios muebles y fotografiaba
apasionadamente. Nunca pude decidirme por una de éstas actividades,
pues todas me interesaban con la misma intensidad. Y porque las
técnicas innovativas tanto me inspiran, pronto cambié el órgano
de iglesia por el sintetizador, y luego los lápices de dibujo y
el cuarto oscuro por el arte computarizado.
Después de la escuela estudié en la Escuela de Bellas Artes de Berlin
comunicación visual. Paralelamente trabajaba como fotógrafo y técnico de sonido.
En mis viajes cambié la cámara por el micrófono y así comencé a
coleccionar sonidos. Esta fué la base para mis futuros trabajos con música
experimental y proyectos de catálogos de sonidos (samples). Mi instrumentario
se convirtió mientras tanto en un estudio de sonido profesional
especializado en música electroacústica. La radio me ofreció un
trabajo como autor de una emisión especial sobre música electrónica. Durante
este período de dos anos realizé diversas composiciones de demostración,
e las cuales muchas fueron publicadas.
A través de éste programa de radio recibí el encargo de componer
la música para una performance de danza en la "Berliner Schaubühne".
Luego firmé un contrato con un sello disquero de Hamburgo, y poco
después con uno de Paris. Desde entonces me presento en todos mis proyectos
bajo el nombre PROPELLER ISLAND. Este seudónimo viene de un libro de Julio Vernes
escrito a fines del siglo XIX. La historia trata de una isla artificial
que navega con sus pasajeros por los mares del mundo: ¡anticipando el
futuro! ...Pero sobretodo escojí éste nombre porque suena bien en inglés y
alemán, y porque uno se puede imaginar cuánta cosa con él, no sólo música.
Luego fundé mis propios sellos disqueros (labels) para así independizarme
por completo, y en éste tiempo publiqué una buena cantidad de cd musicales, esculturas
acústicas, sample cd´s y cd roms con samples de sonidos bastante
inconvencionales bajo el nombre PROPELLER ISLAND.
|
|
|
La única excepción sin éste seudónimo
fué el trabajo como parte del equipo de compositores llamado TONART. Aquí me
junté por un tiempo con otros artistas para producir y publicar música
avantgardística. Después del quinto cd nos separamos.
Para poder financiar mis proyectos musicales y mi estudio de grabación decidí
construir en mi apartamento dos cuartos de huéspedes para arrendar.
Y así, porque la idea de disenar dos habitaciones normales me parecía
tan aburrida, nacieron los primeros cuartos de la CITY LODGE.
Sobretodo en inglaterra (a través de la prensa) se volvieron
éstos cuartos tan populares, que los arriendos me mantenían completamente
ocupado, y ya no me quedaba tiempo para mis asuntos musicales.
Por eso decidí ensanchar el negocio con la idea de
entonces poder contratar el personal adecuado
y así otra vez tener tiempo para mi música. ¡Qué naif!...
En ésos días se me ofreció la oportunidad de comprar una pensión
vieja localizada precisamente en el edificio dónde yo vivo. Los trabajos
de ensanche duraron cinco largos anos, en los que dí forma a cientos de
objetos, muebles e imágenes, planeé nuevos conceptos como no-hotelero, busqué
soluciones para la seguridad de los usuarios, y convencí a las autoridades de la
funcionalidad y aptitud de mis fantasías.
¡Fué un camino abrumador! Por eso estoy tan orgulloso de mi obra de arte, en la que tantos dudaron
y que ahora atrae a los amantes del arte del mundo entero, ¡ inclusive
arquitectos y hoteleros de verdad!
Sólo para la música no he podido aún encontrar tiempo y tranquilidad... Y fué
para eso que hice todo lo que hice, ¿no?... ¡Así es la vida!
|
|
Lars Stroschen, Verano 2004 | Curric
|
|
|